The Collective es un espacio cálido y acogedor que acaba de abrir en el Raval de Barcelona. Lo
visitábamos pues por vez primera y nos sentimos muy bien acogidos.El público llenó las 40 sillas que forman éste hogar de piedra. Nosotros nos sentimos un poco fríos al principio pues el volumen no podía estar muy alto, como siempre en ésta ciudad, por el "tema vecinos". Ésa carga energética que nos retroalimenta fue suplida con un buen feed-back con el público y con más sutileza en los temas.
La energía fue creciendo y en la segunda parte nos decidimos incluso a interpretar un tema que está aún en proceso de construcción. El poema "Hago lo que puedo" con una melodía creada por Andrea. Fue un momento emocionante y muy vivo. Tan vivo como lo son los poemas musicados que improvisamos en escena, con versos del público. En ésta ocasión, el tema que propusimos fue: "Déjà vu" y como resultado, una bella mezcla de humor y ternura.
Os dejamos con el texto, un verso por cada persona que quiso colaborar:
Déjà
vu.
Déjà
vu.
Déjà
vu.
Tengo
un déjà vu, cuando despierto y no estás tú.
Cuando
me miro al espejo.
Cuando
me escapo y me emborracho para dejar de pensar en ti.
Cuando
no lo escojo, pero me alegro, porque de pronto, de ése recuerdo me
despojo.
Con
un didgeridoo, susurro un déjà vu. Recuerdo que el futuro era sólo
pura luz...
Pero
sale Rajoy por la tele y no puedo ver más que a un pelele.
Tengo
un déjà vu cuando hablamos, recordamos, momentos vividos,
repetidos.
Un
tiempo olvidado, poco recordado.
Efímeros.
Aparecen. Desaparecen. Y no queda ni el recuerdo...
Noche
que se cierra, barca que se aleja... ¿Cómo es posible que la barba
decrezca?
De
Javi el careto vi y me reto a recordarlo. Me suena de algo su jeta:
Déjà vu, ¡la jeta de Javi aquí!
Tinc
un déjà vu, quan em miro al mirall i veig que em faig gran.
Tengo
un déjà vu, cuando soy consciente que lo mejor está por compartir
y por bailar.
Cuando
bailo. ¡El que tiene un talento, debe usarlo!
Tengo
un déjà vu, al entrar en una casa abandonada y ver dos veces al
mismo gato.
Al
ver mis pasos persiguiendo tus huellas.
Al
ver que soy chiquitito como una pepita de aji, pero tengo el corazón
grande para quererte así.
Cuando,
estrecho de miras, caigo en tumbos por el mismo zarzal y adivino que
a lo lejos, quizás, todo será igual...
Cada
vez que dudo.
Cuando
me quitan el sujetador a bocados.
Cuando
te miro, me miras y siento la profundidad del momento.
Tengo
un déjà vu cuando cojo una mochila y paseo por Moscú.
Déjà
vu.
Déjà
vu.
Déjà
vu.
“Cuando
despierto y no estás tú.
Cuando
me miro al espejo.
Cuando
me escapo y me emborracho para dejar de pensar en ti”
Tengo
un déjà vu, un maldito déjà vu, un jodido déjà vu...
“cuando
sale Rajoy por la tele y no puedo ver más que a un pelele”.
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